Descripción
Dos pícaros parlanchines, que han realizado el Camino de los Santuarios en repetidas ocasiones, buscan ganarse algo de comida contando la historia de los Santuarios y sus peripecias por dicho Camino, destacando las aportaciones de los reyes de Asturias, desde Don Pelayo (año 718) hasta Ramiro III (año 866) y su influencia en este camino. Para hacer más ameno el relato, dramatizan la vida y situaciones de estos importantes monarcas para ello cuentan con el acompañamiento musical de un pobre mudo.